jueves, 16 de octubre de 2008

"Frivolidad" (1995) de Juan Forn.



- Copia de la escena en Sobre héroes y tumbas de Ernesto Sábato de Loiácono.

Pág 84.

“Los gorilas no quieren ser humanos; no pueden. Si nacen en cautiverio, nunca maduran. Si son capturados cuando ya han alcanzado su madurez, languidecen en cautiverio. Su cabeza rechaza toda enseñanza que no continúe el proceso de maduración de su especie. Ningún gorila consigue asimilar el mecanismo pavloviano clásico de laboratorio: se niegan sistemáticamente a hacer una monería para recibir una banana. En la selva la banana está: para el que tiene hambre, no para que el que hizo la monería para ganársela. Los gorilas no creen en la acumulación: no quieren una banana de más, cuando están satisfechos. Porque no tienen vanidad: ningún gorila trata de ganarse la simpatía ajena con monerías.
El chimpancé, en cambio, evoluciona en cautiverio. En la misma forma, casi, en que el ser humano evoluciona en las ciudades: propulsado por la vanidad, por el afán de ser lo que no es, a través de la emulación.”

Pág 198.

“Dejáme decirte una cosa: el peor estigma de nuestro tiempo no es la falta de creencias sino la falta de realismo para encontrarlas. Y eso no es escepticismo sino frivolidad.”

Pág 238.

En Frivolidad, Forn, Juan, Editorial Planeta, 1998.

1 comentario:

Michelle dijo...

no, los gorilas no quieren ser humanos. quieren ser pájaros.